Nuestra lucha no se trata de una mera elección estrecha entre opciones electorales dentro del actual régimen, sino de apostar por formas de organización económica y espiritual, cualitativamente superiores a la civilización burguesa, donde se garantiza la emancipación del proletariado y la democracia real. Es la lucha popular por la conquista de la civilización socialista, partiendo del estudio científico de las bases materiales que lo posibilitan y con el objetivo último del comunismo.

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29 de diciembre de 2009

Mamá, ya he ganado mis primeros mil millones

Los Matvienko, dueños de Leningrado

Según informa el diario económico de S. Petersburgo “Delovoi Peterburg” los activos de Serguei Matvienko, hijo de la actual gobernadora de S. Petersburgo, se valoran ya en mil millones de dólares.

Y es que hay que ver lo emprendedores e inteligentes que son estos hijitos e hijitas de gobernadores. Parece que vienen al mundo con un sello en la frente que pone “gran empresario”. Como director general de “VTB developement”, que solo es la punta del iceberg, se encarga de los principales proyectos inmobiliarios de la ciudad. Matvienko es a su vez propietario de “MST holding” e “Imperia”, creada en 2003, el mismo año que su mamá Valentina Matvienko, ocupó por primera vez el sillón de gobernadora de Petersburgo. (¡Qué coincidencia! La vida está llena de casualidades). Ahora “Imperia” ha parido 28 empresas filiales que abarcan todo el abanico de actividades, desde empresas de transporte hasta medios de comunicación.

Serguei Matvienko ha decidido hacer pública su relación con esas empresas, bien para facilitar las inversiones en los proyectos que construye, bien para vender sus negocios a un inversor extranjero o inclusive al gigante “Gazprom”. Es la explicación más probable a esta repentina transparencia.

Los gobernadores vienen y van. Junto con ellos unos “Imperios” se crean y otros desaparecen. Los únicos que permanecen son aquellos a costa de los cuales estos “imperios” se crean y viven.

En “Crimen y castigo” Porfiri Petrovich, que investiga a Raskólnikov, divide el mundo entre los que “tienen derecho” y las “bestias temblorosas”.

¿Cuándo nos cansaremos de ser bestias temblorosas?

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2 Comments:

Anonymous Anónimo said...

La lucha es permanente,cada quien en su lugar a ganar las batallas socialistas, contra los explotadores vivarachos que se enrriquecen del trabajo y propiedad ajena.

9:15 p. m.  
Anonymous Anónimo said...

Esta es la macabra história quela vida nos muestra cuando en las tareas de la revolución abandonamos la vigilancia revolucionária y le cedemos el terreno al enemigo o a las fuerzas poco seguras de su deber. Si algún día en la sufrida Rusia vuelve la clase obrera y su aliado campesino al poder, volverá atesorando una gigantesca y amarga esperiencia que jamás bajará su guardia hasta dejar sepultado para siempre los intentos de recuperar sus privilégios por la burguesía añorante de pasado glorioso. Otra vez Volverá Octubre.

2:24 p. m.  

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