La burguesía letona quiere engañar al pueblo formando gobierno con la izquierda

El camarada Alfred Rubiks, el principal dirigente del Centro de la Concordia y del PS

Al imperialismo europea le exaspera el avance democrático soviético en Letonia, antigua colonia nazi y país clave para destruir la Unión Soviética. Se cae un símbolo de la lucha anticomunista. Lenin en Riga

El primer ministro burgués Valdis Dombrowkis quiere tender una trampa a la Coalición de centro izquierda, Centro de la Concordia, que ha conseguido el segundo puesto en las recientes elecciones. Quiere eliminarla como fuerza de oposición en el momento en que aumenta la crisis provocada por la dependencia de Letonia con respecto al podrido capitalismo imperialista europeo. Si dicha coalición acepta el regalito envenenado, el electorado la castigará en las siguientes elecciones y el pueblo habrá perdido una alternativa democrática, anticapitalista y prosoviética al actual régimen fracasado. Esperemos que los partidos que la integran, el Partido Socialista (comunista), el partido socialdemócrata Concordia y el partido socialdemócrata de la ciudad de Daugavpils, actúen con inteligencia y hagan fracasar esta maniobra de una burguesía antinacional que ha ganado por poco las elecciones porque todavía subsiste una fracción del pueblo alucinada con el nacionalismo burgués que ha hecho del país una miserable colonia de la UE-OTAN.